La esterilización y castración de los gatos son procedimientos fundamentales para el control de la población felina y la mejora de la calidad de vida de nuestras mascotas. Aunque ambas intervenciones son comunes, existen muchos mitos alrededor de ellas que pueden generar dudas entre los dueños de gatos. En este artículo, explicamos detalladamente la diferencia entre ambos procedimientos, desmentimos los mitos más extendidos y analizamos los beneficios para la salud y el comportamiento de los felinos.
¿Qué es la castración?
La castración es una intervención quirúrgica en la que se extirpan los órganos reproductores del animal. En los machos, esto implica la extracción de los testículos, mientras que en las hembras pueden extraerse solo los ovarios (ovariectomía) o los ovarios y el útero (ovariohisterectomía).
Este procedimiento tiene efectos permanentes, eliminando por completo el comportamiento sexual del gato y reduciendo el riesgo de enfermedades asociadas a las hormonas reproductivas. La recuperación de los machos suele ser rápida, de apenas 1 a 3 días, mientras que en las hembras el proceso puede tardar entre 3 y 7 días.
¿Qué implica la esterilización?
A diferencia de la castración, la esterilización impide la reproducción sin eliminar los órganos sexuales. En los machos, se realiza el corte de los conductos deferentes, y en las hembras, la ligadura de las trompas de Falopio.
El principal inconveniente de esta intervención es que, aunque el gato no podrá reproducirse, seguirá teniendo el celo, con los comportamientos asociados como maullidos constantes, marcaje de territorio y el deseo de escaparse en busca de pareja. Para entender mejor cómo afecta el celo en los gatos, puedes consultar nuestro artículo sobre cómo es el celo en los gatos.
Mitos sobre la esterilización y castración
1.- Una hembra debe tener una camada para estar sana
Es uno de los mitos más extendidos, pero no tiene base científica. Las gatas no necesitan reproducirse para desarrollarse correctamente ni para ser felices. De hecho, la castración temprana reduce el riesgo de cáncer de mama y evita complicaciones en la gestación. Para más información sobre el cáncer en felinos, te recomendamos leer sobre el cáncer también afecta a los gatos.
2.- Solo las hembras deben esterilizarse
Castrar a los machos también es importante, ya que reduce su agresividad, el riesgo de enfermedades y la tendencia a escaparse. Un gato sin castrar puede embarazar a muchas hembras, contribuyendo a la sobrepoblación felina. Esto es crucial para abordar problemas de abandono de gatos.
3.- Los gatos esterilizados engordan
Si bien los gatos castrados pueden tener menos actividad, la obesidad no es inevitable. Con una dieta equilibrada y suficiente ejercicio, los gatos pueden mantener un peso saludable. Para profundizar en la alimentación de tu mascota, consulta nuestros consejos sobre comida para gatos.
4.- La castración altera el carácter del gato
La castración puede hacer que el gato esté más tranquilo al eliminar los impulsos hormonales, pero su personalidad básica permanecerá intacta. Si el gato era cariñoso antes de la cirugía, lo seguirá siendo después.
El comportamiento de los gatos es un aspecto fundamental que todo dueño debe conocer.
La duración de la esterilización y la castración son factores que también se deben considerar antes de realizar estos procedimientos.
Beneficios de la esterilización y castración
- Reducción de enfermedades: Disminuye el riesgo de infecciones urinarias, cáncer de mama en hembras y tumores testiculares en machos.
- Comportamiento más tranquilo: Los gatos castrados son menos propensos a peleas, escapadas y marcaje con orina. Para evitar estas peleas, es fundamental entender cómo se relacionan los gatos, y para ello, puedes leer sobre cómo evitar las peleas entre gatos.
- Mayor esperanza de vida: Al reducir el riesgo de enfermedades, los gatos castrados suelen vivir más tiempo.
- Control de la población: Previene la sobrepoblación felina y reduce el abandono de gatos en la calle.
La esterilización y castración son procedimientos seguros y beneficiosos tanto para los gatos como para sus dueños. Más allá de los mitos, estas intervenciones mejoran la calidad de vida del animal y ayudan a reducir el abandono y la sobrepoblación felina. Si tienes dudas, consulta con tu veterinario para tomar la mejor decisión para tu mascota.
¿Castración o esterilización? Cuento mi experiencia con mis gatos:
Primero quiero recalcar algo importante que he visto en otro post, donde se recomienda castrar a los gatos a la edad de entre 6 a 8 meses. Yo llevé al veterinario a 3 machos de poco más de 7 meses y ya habían embarazado a sus 3 hermanas, así que mejor prevenir que tener que «colocar» 16 preciosos (todo hay que decirlo) y lindos gatitos.
Por cierto que a estos 3 los esterilizaron, no castraron, es decir les hicieron el pequeño corte en sus testículos. Tuvieron una rápida recuperación, quizás demasiado rápida porque los dejamos por la mañana en la consulta y sobre las 17 h los fuimos a recoger. Nos dijeron que estarían dormidos/atontados hasta la noche, que no salieran de sus transportines porque se podían hacer daño al estar anestesiados todavía, etc.
Fue llegar a casa y se desesperaban por salir del transportín. Andaban con algo de torpeza al principio, pero al rato ya se paseaban, comían, bebían, etc.
Dos tenían los cortecitos bien cosidos pero el tercero le quedó un corte un poco abierto, pero bueno se lo fuimos vigilando que no se infectara, en unos días se le cerró y todos bien.
Comportamiento de los 3 machos después de esterilizarlos:
Dos de los machos están perfectos, yo diría que igual que antes, desde luego no maullan, no marcan, bueno tampoco lo hacían antes, y casi no le hacen caso a las hembras. Estupendo.
El otro, el tercero se ha puesto gordo como un panda, haciendo y comiendo exactamente igual que los otros porque están juntos. Aunque ha ido bien la esterilización porque ya no marca la casa lo que era un fastidio la verdad, te encontrabas con su marca de orina, o lo que sea que echen, por varios sitios, y es igual lo que hiciéramos, o echáramos en los lugares (4 o 5) que había escogido. Sólo podíamos lavarlos, que por cierto compré un espray especial, algo carillo, que eliminaba los olores, pero no las manchas, probé varios productos y al final encontré la solución en el jabón más cercano, la pastilla de jabón de manos tipo «Lux», es como lejía pero sin desteñir y además perfuma.
Y ya advierto, es del todo inútil regañarlo, castigarlo o cualquier otro método que se suela utilizar, no se enteran de nada o de la «faena» que han hecho. Una vez el lindo gatito «marcó» los libros del cole de mi hija, evidentemente me enfadé con él y lo encerré en la galería, lo veía a través de la puerta de cristal, observaba su tristeza y a la vez desesperación por salir de alli (es una galería que da a la calle así que no era para tanto) verlo así de asustado/desconcertado fue peor que limpiar los libros, que fue el rato que estuvo ahí, así que si os pasa, mejor esterilizar y un poco de paciencia hasta que no lo hagáis.
Lo del tamaño es curioso que sea por la esterilización, en la camada que tengo, o sea hermanos, de uno a otro se llevan el doble, una se quedó pequeñita, la blanca y negra de la que hablo en otros posts, es la más graciosa de todas o por lo menos la más… de todo, curiosa, lista, juguetona, cariñosa, madraza aunque no ha tenido bebés, ha sido espectacular como se ha cuidado de los 16 bebés de las otras 3 mamás, los lavaba, los llevaba de aquí para allá si consideraba que no estaban bien atendidos, eso sin contar como ha tratado a las madres durante el parto, las consolaba en su regazo, lamiéndolas la carita, y después del parto las ha dejado a ellas (cansadas a más no poder),limpias por sus «partes» y actualmente está haciendo de niñera, jugando con los gatitos, bueno es tan atenta que yo diría que no duerme nunca, siempre está ahí mirándome sea la hora que sea.
También 2 gatitos de los 16 se están quedando «enanos», a mí particularmente me parecen más graciosos así, parecen bebitos y a la larga, comerán menos, ensuciarán menos tierra, etc. que se queden pequeños lo veo más una ventaja que una desventaja.
Y es verdad que cuando están en celo marchan y les puede pasar mil cosas y todas malas.
Tengo dos gatos de 5 mises. une hembra y uno macho… acabo de castrar al macho.. todo bien.. salvo que su hermana.. ya no quiere acercarsele e incluso ella esta un poco agressive con el.. antes de la castracion eran grandes «amigos». debo decir que el dia de la castracion mi gato paso todo el dia en la clinicat… Que puedo hacer para que vuelvan a ser amigos?
Hola Manuel.
Es normal que durante los primeros días (incluso durante las dos primeras semanas) tras la castración los gatos que eran amigos antes se comporten de una manera extraña, ya que el olor que desprende el gato castrado es diferente al que tenía antes.
Para ayudar a que se vuelvan a hacer amigos, puedes utilizar Feliway en difusor -colocándolo en la habitación donde está el recién operado-. De esta manera, su hermana se sentirá mucho más tranquila.
Ánimo.