Vale. Todos los felinos son preciosos, pero hay alguno que es… bueno, especial. Su nombre es Wilfred, y es un persa que ha tenido la mala suerte de nacer con los ojos desviados y con sus colmillos sobresaliendo de su boca.
Es del Reino Unido, y está considerado el gato más feo del mundo, pero gracias a las fotos y vídeos que su humano ha ido subiendo a Instagram se ha vuelto muy popular en todo Internet.
¿Cuándo empezó a hacerse famoso?
Toda la historia de Wilfred empieza cuando su persona, Michael Rapaport, graba al felino disfrutando tranquilamente de estar en el patio de su casa… observando a otro gato que se encuentra tumbado en la repisa de una ventana. Rápidamente se hizo viral, así que tuvimos y tenemos la oportunidad de entretenernos con el gran sentido del humor de Rapaport.
De hecho, a día de hoy cuenta con 996.000 seguidores en Instagram y ha creado una tienda donde vende camisetas, tazas, etc. con la cara del peludo.
Entonces, ¿es feo o no?
Bueno. Para algunos sí que está considerado como el gato más feo del mundo. Es más, si buscas eso en Google uno de los primeros resultados que te muestra es precisamente a Wilfred. Aunque, si te digo la verdad, soy de las que piensan que no hay ningún gato que sea feo. Sí que tiene una anatomía curiosa, pero de ahí a etiquetarlo como feo… pues hay una enorme diferencia.
Lo que sí está claro es que su humano se siente muy orgulloso de él, que es lo que a fin de cuentas importa. Lo ha convertido en un gato famoso, consiguiendo que cada vez más personas sientan aprecio por el felino.
Si todos los que conviven con gatos (o con cualquier otro animal) sintieran cariño por sus animales, seguramente viviríamos en un mundo mejor.