Como todos ya lo sabemos, y sobretodo aquellos que tenemos gatos, este tipo de animalitos, suelen ser bastante curiosos, por lo que en algunas ocasiones, pueden terminar metiéndose en problemas y terminando heridos o con algún tipo de cortada que empieza a sangrar de manera impresionante y alarmante.
Aunque generalmente, las heridas que puede recibir nuestro animalito al salir de casa, y encontrarse en contacto con otros animales, son superficiales, y no requieren de atención veterinaria, es importante que aprendamos algunos aspectos para poder limpiarlas y cuidarlas, para que no terminen infectándose o complicándose.
Si notamos que nuestro gato se ha cortado y presenta una hemorragia, pero la herida no se ve muy profunda, no tenemos que correr donde el veterinario, sino que nosotros mismos podemos encargarnos de la curación de nuestro animalito. Eso si, te recomiendo que sigas algunos pasos y que tengas a consideración algunas medidas, como por ejemplo limpiar muy bien la herida con una gasa humedecida en suero fisiológico, para luego proceder a cortar el pelo alrededor de la herida y aplicar un antiséptico suave que no le cause ardor.
Después de realizar esto, te recomiendo que apliques un poco de vaselina, sobretodo en los bordes de la herida, para impedir que algunos pelos puedan caer ahí, causando infección y dolor. Si notas que tu animalito empieza a sangrar mucho, debes tratar de parar el sangrado, haciendo algún tipo de presión en el lugar donde se encuentra la cortada, pero si el sangrado no para, te recomiendo que lo lleves de inmediato donde el veterinario para que sea evaluado.
Para detener la hemorragia o los sangrados, debes cubrir la herida con una almohadilla de gasa emparamada en agua fría y realizar un poco de presión. Si a pesar de este intento, el sangrado no para, debes asegurar la gasa con algún tipo de vendaje y colocar encima otra almohadilla de gasa. Para reforzar el vendaje, es recomendable que pongas otro alrededor de la segunda almohadilla.