La esterilización en gatos y gatas es un procedimiento que ha marcado un antes y un después en el cuidado de nuestras mascotas, mejorando su calidad de vida y evitando problemas de sobrepoblación felina. Gracias a esta cirugía, los gatos dejan de experimentar el celo, lo que les permite llevar una vida más tranquila y centrada en su entorno familiar. Para los dueños, también supone una ventaja, ya que evita la preocupación de camadas no deseadas, las cuales, lamentablemente, suelen tener dificultades para encontrar un hogar adecuado.
Sin embargo, cuando adoptamos un gato nuevo, surge una duda importante: ¿cómo saber si un gato ha sido esterilizado? Este artículo te ofrece una guía completa y detallada para identificar si un gato, macho o hembra, ha pasado por este procedimiento.
¿Cómo identificar si un gato macho ha sido esterilizado?
Para saber si un gato macho está esterilizado, se pueden considerar señales físicas y ciertos cambios en su comportamiento. A continuación, detallamos los aspectos más relevantes:
- Examen de los testículos: Coloca a tu gato en una posición cómoda, usando unos guantes de látex para evitar incomodidades. Revisa el área genital. Si el gato está esterilizado, solo notarás un saco vacío, ya que los testículos han sido removidos. En caso contrario, podrás palpar una pequeña bolita en el interior.
- Distancia entre el ano y el pene: En un gato adulto esterilizado, esta distancia suele ser más corta, entorno a 2,5 cm. En gatos jóvenes, puede ser de aproximadamente 1,3 cm.
- Marca en la oreja: En muchos programas de control de población, los veterinarios realizan un pequeño corte en la punta de una oreja como señal de que el gato ha sido esterilizado. Este corte es indoloro y se hace mientras el gato sigue bajo anestesia.
¿Cómo saber si una gata ha sido esterilizada?
Las gatas presentan algunas señales físicas tras pasar por una esterilización. Observa atentamente su abdomen y otras áreas clave:
- Cicatriz en el abdomen: Las gatas esterilizadas suelen tener una cicatriz en la parte inferior del abdomen, que es una línea recta y fina. Si la operación fue reciente, también podrías notar un área rasurada.
- Marcas de tatuaje: Algunos veterinarios realizan un pequeño tatuaje en el abdomen para señalar que la gata ha sido esterilizada.
- Corte en la oreja: Al igual que en los machos, este es un indicador visual utilizado sobre todo en gatos callejeros que participan en programas de control poblacional.
Cambios de comportamiento que pueden indicar una esterilización
Además de las señales físicas, el comportamiento del gato o la gata puede ofrecer pistas clave sobre su estado:
- Reducción de las necesidades territoriales: Los gatos esterilizados suelen orinar menos para marcar territorio y muestran menor agresividad hacia otros gatos.
- Menor inquietud durante el celo: Una gata esterilizada no entra en celo, por lo que no presentará comportamientos como maullidos intensos o intentos de escape.
- Mayor tranquilidad: Tras la esterilización, tanto machos como hembras tienden a ser más sedentarios y disfrutan más del tiempo en casa.
Importancia de la visita al veterinario
Si a pesar de las señales mencionadas te quedan dudas sobre si tu gato ha sido esterilizado, lo mejor es acudir al veterinario. Un profesional podrá realizar un examen físico completo e incluso utilizar técnicas como ultrasonidos para confirmar el estado del animal. En algunos casos, las cicatrices pueden no ser visibles debido al tiempo transcurrido desde la operación o si se utilizó una técnica laparoscópica.
El veterinario también puede verificar la presencia de comportamiento relacionado con hormonas sexuales, como el marcaje o los signos de celo, y aconsejarte sobre los cuidados específicos en caso de que descubras que tu gato no ha sido esterilizado.
Beneficios de esterilizar a tu gato o gata
La esterilización no solo beneficia a tu gato o gata, sino también a la comunidad y a la relación que compartes con tu mascota:
- Control de la población: Evitar camadas no deseadas ayuda a reducir el número de gatos callejeros o abandonados.
- Mejora de la salud: Este procedimiento reduce el riesgo de enfermedades como infecciones uterinas, cáncer de mama en hembras y tumores testiculares en machos.
- Comportamiento más tranquilo: Los gatos esterilizados suelen ser más dóciles y menos propensos a escapar o pelear con otros animales.
- Mayor esperanza de vida: Al eliminar ciertos riesgos de salud, los gatos esterilizados tienden a vivir más años y con mejor calidad de vida.
Dar la bienvenida a un gato esterilizado en tu hogar es una oportunidad para ofrecerle una vida plena y feliz. No solo estarás mejorando su bienestar físico y emocional, sino también siendo parte de un esfuerzo colectivo para cuidar y proteger a estos maravillosos animales.