¿Te imaginas poder ir a un lugar donde hubiese personas a las que les gustan o sienten curiosidad por los felinos y donde puedas acariciar a los gatos? Ese sitio existe, y, aunque todavía no hay uno en cada parte del mundo, está teniendo tanto éxito que no me extrañaría nada que pronto abriesen nuevos en otros lugares.
Y es que, lo que debió de empezar como una prueba en Taiwán en 1998, se ha convertido en una atracción para los catlovers. Estoy hablando, por supuesto, de los cafés de gatos.
¿Qué son los cafés de gatos?
Son cafeterías… pero muy especiales. Has de pagar entrada, y además de tomar lo que quieras puedes pasar el rato en compañía de los preciosos y adorables gatos. Hay quien pasa horas dentro, y es que, entre las múltiples cualidades que tienen estos felinos hay que destacar la capacidad que tienen de relajarnos. Esa dulce mirada, el sonido del ronroneo y esas ganas de estar con las personas los convierten en unos animales increíbles.
¿Dónde hay?
Por el momento, sólo se han animado a abrir cafés de gatos en Taiwán, Japón y en Europa. En el Viejo Continente se inauguró el primero en marzo del 2012, en Viena. Al año siguiente, el 21 de septiembre, París decidió apostar también por estas especiales cafeterías abriendo una en el barrio del Marais.
El 15 de octubre del 2013 se abrió uno, La Gatoteca, en España, concretamente en la capital. Además de ser un lugar donde poder disfrutar de una muy buena compañía, es también una oportunidad para conocer a los gatos de la ONG ABRIGA, que se dedica a recoger gatos abandonados y a buscarles un hogar.
En Italia se abrió el 22 de marzo del 2014 el MiaGola cafè, en Torino. El 5 de abril de ese mismo año, también en Torino, se abrió el segundo café de gatos.
Para octubre del 2014, Finlandia ya había abierto uno en Tampere.
Así que ya sabes, si tienes pensado viajar por Asia Oriental o Europa, aprovecha y visita algunos de los café de gatos. Seguro que te lo pasarás estupendamente .
Sí, estaría muy bien ir a uno 🙂