Qué hacer si un gato bebe lejía

Gato atigrado

A diario utilizamos varios productos que son venenosos para el gato, como el lavavajillas o la lejía. Por ello, es muy importante tenerlos siempre guardados para evitar que se pueda acercarse a lamerlo. Ahora bien, con esto no es suficiente, pues si han quedado gotas sin secar el animal podría pisarlas y, cuando se limpiase, se intoxicaría.

Para evitar sustos, o si ya te encuentras en la situación, te voy a explicar qué hacer si un gato bebe lejía.

¿Cuáles son los síntomas de la intoxicación por lejía en gatos?

Gato adulto

Los síntomas más comunes de intoxicación por lejía en gatos son los siguientes:

  • Blanqueamiento del pelo alrededor de la boca
  • Vómitos
  • Babeo excesivo
  • Dolor de garganta
  • Dolor abdominal
  • Dificultad para respirar
  • Náuseas
  • Tos

Dependiendo de la cantidad, los síntomas serán más o menos intensos. En cualquier caso, si vomita, es muy recomendable recoger una muestra para llevársela al veterinario en el caso de que dudes de si ha bebido lejía u otra cosa. Pero, si estás seguro de que se ha envenenado ingiriendo este producto, entonces debes hacer lo siguiente.

¿Qué hago si mi gato ha bebido lejía?

La lejía es un producto que puede producir quemaduras internas, por lo que no tenemos que inducirle el vómito. Sin embargo, es aconsejable que le demos de beber agua para que la pueda expulsar con la orina. Eso sí, sin obligarle. Por muy nerviosos y preocupados que estemos, nunca hay que obligarle a beber, ya que podría ser peor.

Otra de las cosas que debemos hacer es lavarlo y enjuagarlo a consciencia con un champú específico para gatos para eliminar cualquier resto que haya podido quedar en su piel o pelo en una habitación cálida, de manera que nos podamos asegurar de que el animal no coge frío.

Una vez dados los primeros auxilios, especialmente si no mejora, tenemos que llevarlo urgentemente al veterinario.

¿Cuánto tarda en recuperarse un gato envenenado?

Gato bicolor

La respuesta va a depender mucho del tipo de veneno que haya ingerido y de lo rápido que se haya detectado. Si hablamos de que ha bebido lejía y nos lo encontramos a los pocos minutos del suceso, desde que lo llevamos al veterinario hasta que se recupera del todo pasarán solo unos días; pero si nos lo encontramos ya mal, tumbado y/o con problemas para respirar, las primeras 48 horas son muy críticas, y si las supera, puede que le quede alguna secuela (como molestias al tragar, o en el abdomen) de por vida.

¿Cuánto tiempo tarda el veneno en hacerle efecto a un gato?

Depende del tipo de veneno y de la cantidad que haya tomado. Cuanto más corrosivo sea y mayor cantidad haya ingerido, más rápido le causará síntomas. Pueden ser horas o días. Por ejemplo, una de las gatas que viven en el jardín se empezó a encontrar muy mal al día siguiente de que yo les pusiera a todos una pipeta antiparasitaria.

Al parecer esta gata debió de llegar al líquido (que se tiene que poner en la parte del cuello, la que une la cabeza con la espalda, justo en el centro), y su cuerpo reaccionó de forma exagerada. La llevé al veterinario, y tras realizarle una radiografía vimos que tenía líquido en los pulmones, que era el motivo por el que tenía problemas para respirar con normalidad (de hecho, jadeaba) y caminar.

Tras el tratamiento con medicamentos de unos días, y de tenerla una semana en casa, consiguió recuperarse.

Y estamos hablando de una pipeta antipulgas para gatos, no de lejía ni raticida ni cualquier otra cosa. Por eso, hay que tener muchísimo cuidado con dejar según qué al alcance de los animales, ya que los síntomas de envenenamiento pueden aparecer hasta varios días después.

¿Qué siente un gato cuando es envenenado?

Cuando los síntomas aparecen, lo que siente es mucho dolor. Dependiendo de qué veneno haya ingerido (o le hayan hecho ingerir, que ese es otro tema del que no vamos a hablar aquí, pero que daría bien para un libro teniendo en cuenta el poco o ningún respeto que tienen algunas personas por los gatos), notará lo siguiente:

  • Parálisis de las patas
  • Imposibilidad de maullar debido a la falta de oxígeno
  • Los músculos se contraen y se endurecen
  • La garganta se le puede cerrar

Diferencias entre muerte por envenenamiento y muerte por atropello

Benji, descansando.

Mi gato Benji, fallecido el 30 de marzo del 2019.

El pasado 30 de marzo del 2019 uno de mis bombones, Benji de casi cinco años de edad, falleció. Siempre fue un gato semi-asilvestrado, y adoraba la libertad. Yo, como vivimos en una zona del pueblo donde hay varios solares y pocos peligros, pues siempre le he dejado salir. Pero la verdad es que ahora no puedo decir que no me arrepienta.

Benji era un cielo, una panterita preciosa, independiente sí, pero muy cariñoso. Era un gato muy especial que ese sábado me encontré tumbado en la calle, sin vida. En un primer momento pensé que había sido envenenado, pues tenía mucha saliva seca en el cuerpo, pero a las pocas semanas lo hablé con una veterinaria y me dijo lo siguiente:

  • Ningún veneno actúa en pocos minutos (había salido a buscarlo 20 minutos antes, y luego volví y ya estaba totalmente rígido).
  • No hay venenos que hagan que el animal expulse sangre.

Por ello, su teoría es que Benji sufrió un traumatismo en el tórax, causado por un vehículo, de forma accidental porque no tenía ninguna fractura aparentemente.

Y por este motivo, no quería acabar este post sin añadir esta última sección, por si algún día (espero que no, porque eso significaría que tu felino ya no está contigo) te pudiera servir.

¿Cómo evitar que mi gato ingiera lejía u otros productos tóxicos?

Simplemente, no dejándoselos al alcance. Pero ojo, con esto no será suficiente. Si utilizamos lejía para lavar el suelo por ejemplo, lo ideal será dejar de hacerlo y sustituir la lejía por un fregasuelos natural. Además, se deben secar bien todos los muebles una vez limpios, con el fin de quitar cualquier gota.

El gato es un animal que, si pisa una zona donde justamente hay una pequeña gotita, lo notará y enseguida se lamerá, con el consecuente riesgo de que su cuerpo reaccione y empiece a sentirse mal.

Cualquier precaución es poca cuando se trata de productos potencialmente peligrosos para los gatos. Lo ideal, insisto, es no tener ninguno en el hogar, ya que además también son tóxicos para los humanos.


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      ana maria dijo

    Efectivamente, siempre que paso la fregona (normalmente con algún fregasuelos que contiene lejía y detergente), pienso que si pisan el suelo mojado luego se lamerán las patas, pero tontamente pienso que una vez seco ya no tendrá efecto aunque lo pisen. Eso tengo que corregirlo, y buscar un fregasuelos que no contenga lejía, pero natural, natural… no sé si existen.

    El problema con mi gato mayor es que además A VECES LE HE PILLADO INTENTANDO BEBER AGUA DEL CUBO DE FREGAR, y pienso que ALGUNA VEZ HA PODIDO LLEGAR A HACERLO. Por esta razón me he preguntado si habrá cubos con tapa, aunque yo nunca los ví.

    Y sí, ayer mismo vi un vómito enorme que supuse era suyo; nada sólido, pero los patés dan un vómito liquido, si no tienen «tropezones». El caso es que está un poco más inactivo que de costumbre, y nada del ansia por comer que siempre muestra. Aunque la lejía está mezclada con agua y detergente, supongo que le ha hecho algún daño, pero aparte de cierta apatía, el tío no parece afectado en nada sustancial. Seguramente vomitar lo que ingirió, le ha librado de que la lejía pase de su estómago.

    Lo que sí que yo no sabía es que NINGÚN VENENO PRODUCE HEMORRAGIAS, más bien he oído todo lo contrario, que hay salida de sangre por los orificios del cuerpo (??). Cuido gatos de colonias y siempre que veo uno muerto «a la vista», pienso en un atropello porque, ciertamente, el envenenamiento nunca es instantáneo, y en ese caso ellos tienen tiempo de ocultarse para morir. También un atropello que no sea un traumatismo mortal puede no ser instantáneo, y darle tiempo a esconderse para morir. En fin, como casi nunca se hace necropsia a un gato muerto en la calle (a no ser que convenzas a la policía para hacerlo, pero el coste lo pagas tú), pues es totalmente deductiva la causa de las muertes de los gatos callejeros. Las indicaciones que ha dado esta veterinaria arrojan un poco más de luz acerca de una investigación que raramente se hace. Ha sido muy útil.