Qué hacer si mi gato se atraganta

Es raro que un gato se atragante, pues es muy quisquilloso con la comida, de modo que el riesgo de que termine comiendo cosas pequeñas que le causen ahogamiento es muy bajo. Pero no inexistente. Siempre hay que estar atentos y evitar dejar a su alcance objetos que, por sus características, le resultaran interesantes para jugar y/o morder y que podría terminar tragándose.

¿Qué hacer si nuestro peludo tiene problemas? En la medida de lo posible, hay que tratar de mantener la calma. Si nos ponemos muy nerviosos el animal se estresará aún más, lo cual no es nada recomendable. Sepamos qué hacer si mi gato se atraganta.

¿Cómo saber si mi gato se está ahogando?

El gato a veces puede hacer ruidos que simulan ser de ahogamiento pero que en realidad no lo son. Por eso, para estar seguros de que realmente se ha atragantado hay que observar alguno o varios de estos síntomas:

• Problemas para respirar: hace un movimiento exagerado con el cuerpo tratando de inhalar aire. La boca permanece abierta, con la lengua fuera.
• Tos persistente: el gato trata desesperadamente de expulsar aquello que le está causando problemas tosiendo de manera repetida.
• Babeo: al intentar expulsar el objeto extraño, o la comida que no debería de haber ingerido, empieza a babear de manera excesiva.
• Se toca la boca con la pata: con el fin de expulsar aquello que no debería de estar en su garganta.

Qué debes mirar rápidamente

Además de lo mencionado arriba, debes tener en cuenta lo siguiente antes de tomar alguna medida:

• Tiene tos o arcadas
• Tiene ansiedad o pánico
• Tiene dificultad para respirar
• Se desmaya o pierde el conocimiento
• Tiene mal aliento
• Le falta apetito
• Está apático

¿Qué hacer para ayudarlo?

Si el peludo se está ahogando hay que actuar rápido, siguiendo estos pasos:

1. Envolveremos al animal con una toalla, dejando la cabeza expuesta.
2. Después, le inclinaremos la cabeza ligeramente atrás para poder abrirle la boca.
3. Si vemos el objeto a simple vista, se lo retiraremos con una pinzas.

En el caso de que no se vea el objeto, hay que hacer lo siguiente:

1. Colocaremos al gato en el suelo, delante de nosotros pero en dirección opuesta.
2. Le levantaremos las patas traseras y las sostendremos entre las rodillas.
3. Colocaremos una mano en ambos costados del pecho del felino y lo presionaremos para comprimirlo haciendo movimiento erráticos. No debemos utilizar mucha fuerza, ya que de lo contrario podríamos romperle las costillas.
4. Presionaremos de cuatro a cinco veces con el fin de que el peludo tosa.

¿Qué hago si mi gato está inconsciente?

Si el animal está inconsciente hay que actuar de manera distinta:

1. Lo primero es abrirle la boca, todo lo que sea posible.
2. Si vemos el objeto, se lo retiraremos con unas pinzas.
3. Eliminaremos los fluidos con una tela limpia, y lo colocaremos en una posición en la que su cabeza quede por debajo del corazón para que pueda expulsar los fluidos.
4. Cuando las vías respiratorias estén limpias, realizamos la respiración artificial empleando la técnica de boca a nariz.

Cuando finalmente hayamos podido retirar el objeto, o si estamos teniendo muchos problemas para quitárselo, debemos de acudir al veterinario de manera inmediata.

Asfixia y la maniobra de Heimlich en gatos

Técnicamente, ocurre la asfixia cuando algo se queda atrapado en la laringe o la tráquea, impidiendo el flujo de aire. Esto puede ser casi cualquier cosa, incluso un objeto pequeño como un capuchón, un botón o un dedal. Afortunadamente, la asfixia no suele ocurrir habitualmente en los gatos, aunque cuando ocurre es normal que los dueños se asusten mucho.

Causas primarias

Las piezas de juguetes para gatos, como pequeños pompones o campanas, trozos de hueso astillados y otros objetos extraños pueden quedar atrapados en la laringe y causar asfixia.

Cuidado inmediato

Si tu gato está consciente y no está demasiado molesto, puedes intentar buscar en su boca cualquier objeto extraño. Elimínalo si puedes, pero en la mayoría de los casos probablemente no podrás hacerlo de manera segura. Sin embargo, si tu gato está demasiado molesto para un manejo seguro, envuélvelo en una toalla o ponlo en un transportín para que lo transportes al veterinario.

Si tu gato está inconsciente y no respira, o respira con gran dificultad, y no puedes sacarle el objeto, prueba la maniobra de Heimlich:

1. Acuesta al gato de lado.
2. Pon una mano sobre su espalda.
3. Coloca la otra mano sobre su vientre, justo debajo de las costillas.
4. Con la mano sobre el vientre, da varios empujones agudos hacia adentro y hacia arriba.
5. Revisa la boca en busca de objetos extraños y retíralos, luego cierra la boca y haz una respiración suavemente por su nariz.
6. Repite estos pasos hasta que estés seguro de que no hay ningún objeto extraño presente en las vías respiratorias.

Si el gato todavía no respira después de que se extrajo el objeto extraño, verifica si hay latidos o pulso. Si no puedes encontrarlo, comience la RCP y / o la respiración artificial según sea necesario y lleva a tu gato al veterinario inmediatamente.

Una nota sobre las cuerdas: si encuentra una cuerda (hilo, oropel, etc.) en la boca de su gato, la tentación es sacarla. A menos que se deslice como un fideo de espagueti húmedo, NO lo hagas. Es probable que esté atrapado en algún lugar dentro y tirar solo empeorará las cosas.

En el veterinario

Cuando estés en el veterinario, el profesional hará un diagnóstico de lo que le ocurre al gato y también un tratamiento adecuado a cada caso.

Diagnóstico

El diagnóstico se basará en el examen de tu gato y tu descripción de lo que sucedió. Es posible que se necesiten radiografías de la cabeza, el cuello y el tórax para localizar el objeto extraño. Se puede requerir sedación para el examen y las radiografías.

Tratamiento

Lo más probable es que tu gato sea sedado o anestesiado para eliminar el objeto extraño. La extracción puede ser tan simple como sacarla de la boca, o puede requerir una cirugía complicada en el cuello. El objeto extraño puede causar daños que pueden requerir suturas o antibióticos, especialmente si el objeto ha estado alojado por un tiempo.

Después del tratamiento

Una vez que se ha eliminado el objeto extraño, la curación generalmente continúa sin problemas. Si hubo un daño severo del objeto, o si se requirió cirugía, la parálisis laríngea es una posible complicación. La cicatrización puede causar estenosis (estrechamiento de un pasaje), lo que puede dificultar la respiración o la deglución.

Si tu gato estuvo sin oxígeno durante un período prolongado de tiempo, eso también podría causar problemas, generalmente de naturaleza neurológica, como ceguera o embotamiento mental.

Prevención

Al igual que con los niños pequeños, debe ser consciente de los posibles riesgos de asfixia en el entorno de tu gato. Además, algo etiquetado como un juguete para gatos no es necesariamente seguro para tu gato, especialmente después de que lo haya masticado.

Respiración artificial para un gato que se asfixia

Si el corazón del gato no late, continúa con el RCP. Si está latiendo, realiza una respiración artificial.

• Pon a tu gato de lado
• Extiende la cabeza y el cuello. Mantén la boca y los labios del gato cerrados y sopla firmemente en sus fosas nasales. Administre una respiración cada tres o cinco segundos. Repite hasta que sienta resistencia o veas que el cofre se eleva.
• Después de diez segundos, detente. Observa el movimiento del cofre para indicar que el gato está respirando por sí solo.

Si el gato todavía no respira, continúa la respiración artificial.

Transporta al gato al veterinario inmediatamente y continúa la respiración artificial en el camino hacia el veterinario o hasta que el gato esté respirando sin ayuda.

Reanimación cardiopulmonar para un gato

Si el corazón del gato no late, realiza una reanimación cardiopulmonar (RCP).

• Pon al gato de lado
• Arrodíllate en la cabeza del gato
• Sujeta el cofre para que el esternón del gato descanse en la palma de tu mano, tu pulgar en un lado del cofre y tus dedos en el otro. Tu pulgar y dedos deben caer en el medio del cofre.

Comprime el cofre apretando firmemente el pulgar y los dedos. Esfuérzate por 100 a 160 compresiones por minuto.

Alternativamente (después de 30 segundos), mantén la boca y los labios del gato cerrados y sopla firmemente en sus fosas nasales. Sopla durante tres segundos, respira profundamente y repite hasta que sientas resistencia o veas que el cofre se eleva. Repita esto de 10 a 20 veces por minuto.

Después de un minuto, para. Mira el cofre para detectar movimientos respiratorios y siente los latidos del corazón del gato colocando sus dedos aproximadamente una pulgada detrás del codo del gato y en el centro de su pecho.

Si el corazón del gato aún no late, continúe con la RCP. Si el corazón comienza a latir, pero el gato aún no respira, vuelve con la respiración artificial.

Lleva el gato al veterinario inmediatamente.