¿Has observado que tu gato siente dolor al masticar o que no puede bostezar bien? Con el paso de los años, a medida que envejece, puede acabar padeciendo una enfermedad que se conoce con el nombre gingivoestomatitis crónica felina.
Este es un problema que puede ser muy grave, puesto que al sentir dolor al comer el animal podría dejar de alimentarse. Por este motivo, te vamos a explicar todo lo que tienes que saber sobre esta enfermedad.
¿Qué es la gingivoestomatitis crónica felina?
Esta es una enfermedad muy común en los gatos que afecta a todos los tejidos que están en contacto con la saliva y la placa bacteriana, como las mucosas o el paladar blando.
Lamentablemente, no se sabe cierto cuáles son sus causas, pero sí que te podemos decir que si el gato tiene un sistema inmunológico debilitado o si no se le han cuidado correctamente los dientes (lavándoselos a diario con un cepillo dental y un dentífrico específico para felinos) tiene una mayor probabilidad de verse afectado por la gingivoestomatitis crónica felina.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas son los siguientes:
- Halitosis (mal aliento)
- Dolor al masticar
- Dolor al abrir la boca al bostezar
- Pérdida de interés en la comida
- Pérdida de peso
- Aparición de úlceras en el interior de la boca
- Inflamación y enrojecimiento de la línea gingival
- Rotura o caída de dientes (en casos graves)
¿Cómo se hace el diagnóstico?
Si nuestro gato tiene cualquiera de los síntomas mencionados arriba, hay que llevarlo al veterinario lo antes posible. Allí le harán un examen físico y, si es necesario, una radiografía de la boca, una biopsia y/o un cultivo bacteriano.
Al ser una enfermedad relativamente común en gatos, a los profesionales no les cuesta mucho llegar a ese diagnóstico, pues los daños y las molestias que les causan son bastante característicos.
¿Cómo se trata?
La gingivoestomatitis crónica felina es una enfermedad que, como su propio nombre indica, es crónica, es decir, para toda la vida. Por eso, el tratamiento debe ser también continuado ya que de esta manera el felino podrá llevar una vida más normal. Dicho tratamiento consistirá en:
- Medicamentos analgésicos, antibióticos y antiinflamatorios recetados por el veterinario.
- Limpieza de los dientes por parte del profesional, quien eliminará el sarro acumulado causante del mal olor y de las molestias.
- Extracción de las piezas dentales que hayan resultado afectadas.
- Limpieza dental diaria.
- Si el animal tiene problemas para masticar, la dieta deberá ser blanda, a base de latas de comida húmeda para gatos (a ser posible, sin cereales ya que los gatos no los pueden digerir bien).
¿Se puede prevenir la gingivitis estomatitis crónica felina?
Por desgracia, no hay ninguna enfermedad que se pueda prevenir del todo. Pero como esta afecta a la boca, y en concreto a sus dientes y encías, sí que se pueden tomar algunas medidas para seguirlas ‘desde ya’, y si el animal es joven mejor aún. Son las siguientes:
Cepillarle los dientes a diario
No solo es importante que los humanos nos cepillemos los dientes, sino que también debemos de cepillárselos a nuestros queridos gatos. Así, el riesgo de que tengan gingivitis estomatitis crónica felina será mucho más bajo que si no lo hacemos.
Darle una comida de calidad
Somos lo que comemos, y los gatos también. Si les damos una comida de calidad, sin cereales ni subproductos, no solo conseguiremos que su salud buco-dental sea mejor, sino que además lograremos que su sistema inmunitario se fortalezca.
Por supuesto, lo ideal sería darle comida casera, pero si no queremos o no podemos dársela, podemos optar por darles también sticks aptos para ellos.
Cuidarlo con respeto, paciencia y cariño
Puede que te preguntes qué tendrá que ver una enfermedad buco-dental con el cariño, pues bien. Lo cierto es que no se sabe, o no del todo. Lo que sí que te puedo decir es que para que los gatos la acaben padeciendo se tienen que dar múltiples factores, y teniendo en cuenta que son muy sensibles, muy poco tolerantes al estrés, no sería raro que el vivir en tensión permanente les causase esta u otras patologías.
Pero aparte de eso, hay que cuidarlos bien porque son parte de nuestra familia, porque se supone que los queremos, porque nos importan.
Cuidar a un gato con gingivitis estomatitis crónica. Mi experiencia
Vivir con un gato que tiene esta enfermedad no es fácil. Cuando se diagnostica no es raro ponerse en lo peor, porque sabes que si no come… va a perder peso, y si pierde peso puede morir, y eso es justo lo que no quieres que pase. En el año 2018 tuvimos que sacrificar a Susty, una preciosa gata tricolor de doce años que, pese a que la cuidamos con cariño, pese al tratamiento veterinario, pese a darle (o intentar darle) su comida favorita, llegó un momento en que decidió no vivir. Llegó a ser poco más que piel y huesos. Estuvimos luchando tres años. Pero al final no pudimos hacer nada más de lo que ya hacíamos.
En el año 2019 le diagnosticaron esta misma enfermedad a Keisha, una gata que al momento de escribir este artículo tenía 8 años, aunque por fortuna, al menos por el momento, está controlada. Le hicieron una limpieza, y parece que todo va bien.
Es importante, insisto, que si tu gato esté enfermo le sigas dando el mismo cariño, o más. Que le hagas compañía. Él lo notará, y será más feliz. Keisha agradece las caricias, el que alguien esté con ella. No le gusta que la cojan en brazos -nunca le ha gustado-, pero sí que es de esos gatos que se acurrucan junto a ti cuando te tumbas en la cama o en el sofá. En esos momentos aprovecho y le doy una sesión de mimos. Se lo merece.
La gingivitis estomatitis crónica felina es una enfermedad que puede llegar a ser muy grave, incluso letal, pero por eso mismo hay que ser muy fuertes y luchar por nuestro compañero gatuno.
Para acabar, te dejo este vídeo en el que una veterinaria explica qué es la gingivitis estomatitis crónica felina:
https://youtu.be/LLhjYDpq5ow
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