¿Has oído hablar de la etología felina? Esta es una ciencia en auge, todavía experimental pues no hace mucho que los humanos empezaron a compartir sus hogares con los gatos y cuando estos comenzaron a tener algunos problemas que nos preocupaban.
Pero, ¿qué estudia exactamente la etología felina? Si quieres saberlo, a continuación te diré, además, cuando es recomendable consultar con un etólogo.
¿Qué es?
El comportamiento de los gatos siempre nos ha llamado mucho la atención. Es muy curioso que estos animales, por lo general reservados y muy, muy territoriales, hayan decidido cambiar su libertad por los mimos que le podamos dar las personas. Pero este cambio, esta adaptación, no les ha resultado fácil, y menos desde que empezamos a prohibirles las salidas a la calle por su propia seguridad.
Así fue cuando los pobres peludos continuaron haciendo lo que llevaban haciendo durante milenios, pero en casas: afilarse sus uñas en los muebles, marcar su territorio (o sea, la vivienda 😉 ), defenderse e incluso atacar a lo que sea o a quien sea si sienten que su vida está en peligro,…
También, al obligarles a estar con nosotros, los expusimos a situaciones de estrés, ansiedad, depresión, y lamentablemente también de malos tratos, de acoso, de no dejarles vivir. Por todos estos motivos, surgió la necesidad de comprenderlos mejor para poder ayudarles. Por eso »nació» la etología felina, para dar una respuesta a todas las preguntas relacionadas con el comportamiento de los gatos.
¿Qué estudian los etólogos?
Los etólogos son personas que se dedican al estudio del comportamiento; en el caso de los felinos, de los gatos. Y es que, si bien cada gato es único, sí que comparte con los de su especie una serie de »necesidades comportamentales», tales como rascar en superficies por ejemplo. Estas conductas son muy importantes para ellos, y deben de poder llevarlas a cabo cada vez que lo necesiten.
Si privamos a los gatos de ser y comportarse como gatos, comprometeremos su felicidad.
¿Cuándo consultar con uno?
Consultaremos con un etólogo felino siempre que tengamos dudas sobre el comportamiento de nuestros gatos, o cuando tengamos problemas que no sabemos resolver, relacionado siempre con las conductas felinas. Por ejemplo, nos pueden ser de mucha ayuda en casos como:
- Maúllan por la noche
- Se muestran agresivos con nosotros y/o con las visitas
- Cuando llega un nuevo miembro a la familia y les está costando aceptarlo
- No usan su arenero (aquí tienes información sobre el tema)
- Destroza los muebles con las uñas (en estos casos debemos de preguntarnos si tienen rascador)
- Etc.
Y con esto terminamos. ¿Qué te ha parecido este artículo?