La cola de los gatos y, más concretamente, sus movimientos, nos pueden decir mucho sobre la personalidad y los sentimientos de nuestros queridos amigos. Si queremos saber en todo momento lo que tienen intención de hacer, una buena forma de conseguirlo es observándolos e interpretar su lenguaje corporal.
Para que te sea más sencillo, te vamos a explicar por qué mi gato no deja de mover la cola, y cuál es su significado.
Sentimientos positivos
Buen ánimo
Un gato nos va a demostrar que está contento si mueve la cola lentamente, de un lado a otro. Además, puede tener la cabeza un poquito agachada, pero con los ojos abiertos normalmente. Si se acerca a nosotros en esta posición, lo más probable es que quiera que lo acariciemos 🙂 .
Alegría y seguridad
Cuando tiene la cola levantada con la punta un poco caída, o cuando la tiene más o menos recta y la sacude muy lentamente, significará que se siente bien, alegre y seguro de sí mismo.
Está pendiente
Es lo que va a pasar cuando nos vea con la intención de coger una lata para dársela. Caminará hacia nosotros con la cola más o menos levantada, moviéndola de un lado a otro.
Sentimientos negativos
Irritabilidad
Si lo vemos sentado con la cola moviéndose de un lado a otro haciendo movimientos bruscos, es mejor dejarlo tranquilo ya que seguramente haya ocurrido algo que le ha incomodado.
Sumisión
Cuando un gato tiene la cola entre las patas, es porque se siente indefenso. Por ejemplo, si un gato adulto »regaña» a un gatito, éste puede sentir miedo y, para evitar problemas, se pondrá en posición de sumisión.
Agresividad
El animal estará de pie, y tendrá la cola erizada. Pero no sólo eso, sino que también tendrá la espalda arqueada, y puede gruñir y/o bufar.
Esperamos que ahora te sea más fácil saber qué siente tu gato.