El gato doméstico uno de los problemas más frecuentes que tiene es la enfermedad del tracto urinario inferior, siendo la principal causa la poca ingesta de agua. Cuando no bebe toda la que debería, su salud empieza a debilitarse hasta el punto de que podría acabar con infecciones de orina o con piedras en los riñones.
Si tenemos esto en cuenta, es muy importante asegurarnos de que nuestro amigo bebe, pero ¿qué hacer si no lo hace? En este artículo te contaremos por qué mi gato bebe poca agua, y cómo puedes ayudarle.
¿Por qué bebe poca agua?
Si observas que tu gato ha empezado a beber poca agua, puede ser que se den algunas de estas situaciones:
- El agua está sucia: suponemos que el agua a simple vista se ve limpia, pero te sorprendería lo mucho que detestan que haya una diminuta mota de polvo, lo cual resulta lógico ya que ninguno de nosotros bebería de un vaso cuyo contenido no se viese limpio. Por eso, hay que cambiársela una o dos veces al día; más si hay varios gatos.
- Le sabe a plástico: si le tienes puesto un bebedero de plástico lo más probable es que no le guste el sabor. Por ello, te recomendamos ponerle uno de cristal o de acero inoxidable.
- No le gusta la ubicación de su bebedero: el bebedero, así como el comedero, tienen que estar en zonas donde la familia no haga mucha vida pero que además no haya mucho ruido, como el procedente de la lavadora por ejemplo. Lo ideal es que esté en la habitación donde suela dormir habitualmente, ya que nada más despertarse el gato suele beber.
¿Cómo ayudar a un gato que bebe poco?
Si tras seguir estos consejos sigue bebiendo menos de entre 50 a 100ml por kilo de peso al día, será el momento de buscar otras soluciones. Lo primero que tenemos que hacer es llevarlo al veterinario para que nos diga cómo se encuentra. Como hemos comentado al principio, el riesgo de padecer una enfermedad del tracto urinario es muy alto cuando el gato está deshidratado, y podría necesitar suero intravenoso.
De vuelta a casa, podemos darle pienso húmedo de alta calidad (sin cereales) el cual, al tener un 70% mínimo de humedad, será como si el peludito estuviera bebiendo agua al mismo tiempo que disfruta de una deliciosa comida. Además, se puede mezclar con el pienso seco.
Otra de las cosas que se pueden hacer es usar fuentes para gatos. A los felinos no les gusta el agua estancada, y esto es algo que se puede solucionar con una fuente. La encontraremos en tiendas de animales, y también por Internet. Su precio es muy interesante, costando alrededor de los 23 euros, y a los gatos les suelen encantar.
Espero que te haya sido de utilidad 🙂 .
Gracias por tus palabras, Coralia 🙂