Ver nacer a los gatitos es una experiencia maravillosa, pero a veces pueden surgir problemas. Y es que, aunque no es lo habitual, la gata puede no tener leche con la que alimentar a sus pequeños, de modo que sin quererlo pone sus vidas en peligro.
Pero afortunadamente si han tenido la suerte de estar con buenos humanos no tendrán nada de qué preocuparse: ni la mamá ni sus crías. Así que si tienes dudas, a continuación te vamos a responder a tu duda sobre mi gata no tiene leche para sus gatos, ¿qué hago?
¿Por qué no tiene leche la gata?
Son muchas las causas por las que una gata ya después del parto o a los pocos días no tenga leche para sus pequeños. No es que sea algo grave, es decir, la peluda no corre ningún peligro en un principio, pero sí que hay vigilar a sus gatitos y, también, averiguar por qué le ha pasado:
- Es la primera vez que ha quedado embarazada: al haber sido primeriza, es posible que su cuerpo no haya estado al 100% preparado. Si la gata está por lo demás bien, no hay nada de qué preocuparse, pero una visita al veterinario no está de más.
- Ha tenido crías muy pronto: y es que aunque la madurez sexual la alcanza entre los 6 y los 10 meses de vida de media, se puede dar el caso de que la alcance con 5 e incluso con 4 meses (no, no me tomes por loca: una de mis gatas con cuatro meses y medio ya tuvo el celo, y tuvimos que castrarla justo a esa edad). Y claro, si tiene el celo puede tener cachorros, pero con 4 o 5 meses existe el riesgo de que surjan complicaciones pues no ha terminado de crecer todavía.
- Problemas de salud: si está enferma, y/o si tiene mastitis (inflamación de las glándulas mamarias), puede tener problemas para producir leche.
- Mala alimentación: si ha sido alimentada con comida de baja calidad, es normal que surjan sorpresas desagradables. Para evitarlo, hay que darles al menos piensos de excelente calidad, especiales para gatas lactantes y gatitos y que no tengan cereales.
- Ha tenido demasiados cachorros: a veces pasa que una mamá gata tiene más gatitos de los que su cuerpo puede mantener. Para ayudarla, hay que dejarle siempre el comedero lleno y asegurarse de que bebe agua a placer.
¿Qué hacer si mi gata no tiene leche?
Ahora que sabes por qué no tiene leche, es momento de ponerse manos a la obra para salvar a los gatitos. Lo primero que debes hacer es estimular la producción de leche, pues no hay mejor alimento para los pequeños que el que su madre le puede dar. Para esto, debes hacer lo siguiente:
- darle una alimentación de excelente calidad,
- darle malta,
- colocarle paños humedecidos con agua tibia en las mamas para que la leche baje más rápido,
- llevarla al veterinario. Él te podría recomendar darle medicamentos que la ayudarán a producir leche.
Mientras tanto esperas a ver si la situación mejora o no, los gatitos han de ser alimentados con leche de sustitución que encontrarás a la venta en tiendas de animales con biberón. Otra opción es mezclar:
- 250ml de leche sin lactosa y que no sea de vaca
- Una yema de huevo (sin nada de clara)
- Una pizca de azúcar (la que cabría en la punta de un cuchillo, no más)
Hay que darles cada 3 o 4 horas, en la posición que puedes ver en la imagen de abajo, y procurar que esté templada (a unos 37ºC).
Mi gatita Sasha tomando su leche, el 3 de septiembre del 2016.
Pero insisto, hay que ir observando tanto a la gata como a su descendencia para ver si lo que estamos haciendo le ayuda a producir leche. Si vemos que pasa una semana y no hay manera, entonces proseguiremos únicamente dándoles biberón a los pequeños.
Tienes más información sobre el cuidado de gatas que han sido mamás aquí.