El comportamiento de los gatos es fascinante y, a veces, enigmático. Hay ocasiones en que estos pequeños felinos parecen observar o reaccionar a cosas que sus dueños no pueden ver. Esto ha sido motivo de especulación durante mucho tiempo, pero ahora un estudio publicado por la revista Proceedings of the Royal Society B ha sugerido que los gatos, así como otros animales mamíferos como los perros o los erizos, poseen la capacidad de ver en ultravioleta (UV), un tipo de luz invisible para los seres humanos.
Este sorprendente descubrimiento puede explicar por qué los gatos a veces se comportan de maneras tan extrañas, jugando o persiguiendo cosas que parecen no estar ahí para nosotros.
¿Qué es la luz ultravioleta?
Los humanos solo podemos ver lo que está dentro del espectro de luz visible, que abarca desde el rojo hasta el violeta. Fuera de este rango, en el espectro electromagnético, está la luz ultravioleta, que tiene una longitud de onda más corta que la luz visible y es invisible para los seres humanos. Sin embargo, los gatos y otros animales, como los perros, hurones y roedores, han evolucionado de tal manera que sus ojos permiten que esta luz UV llegue hasta su retina.
El proceso es fascinante: sus ojos están adaptados de una manera que permiten la entrada de rayos UV, lo cual produce un impulso eléctrico que viaja al cerebro y es procesado como parte de su visión. Esto significa que podrían estar viendo detalles especiales en los objetos, patrones de luz invisibles para nosotros, o incluso rastros de orina que brillan bajo la luz ultravioleta.
La utilidad de la visión UV en los gatos
Para un depredador nato como el gato, poder ver en ultravioleta tiene ventajas evidentes. Los gatos pueden seguir rastros de orina de otros animales o incluso de otros gatos para encontrar o marcar territorio. Además, podrían identificar detalles en su entorno que para los humanos pasan desapercibidos, como los patrones que absorben la luz en ciertos materiales, hojas o incluso animales camuflados.
Es por este motivo que, probablemente, los gatos se comportan de manera curiosa ante objetos comunes para nosotros, como una hoja de papel o textiles, que pueden interactuar con la luz UV de maneras sorprendentes para ellos.
Comportamientos extraños: ¿Qué están viendo los gatos?
Si alguna vez has visto a tu gato mirando al vacío, moviendo las patas como si cazara algo o persiguiendo “nada”, probablemente estaba viendo algo que tú no podías percibir. Este comportamiento puede ser explicado gracias a su capacidad de detectar rayos UV. Investigadores como Ronald Douglas y Glen Jeffrey apuntan que lo que para nosotros es un simple objeto inanimado, como una prenda o una pared, para ellos podría estar emitiendo patrones luminosos o energías que se ven solo bajo la luz ultravioleta.
Además de rastros de orina o marcas territoriales, los gatos podrían estar viendo pequeños insectos o partículas en suspensión que no son visibles para el ojo humano. Este comportamiento, inicialmente parece sin sentido, pero al saber que estos felinos tienen una visión mejorada, podemos comprender mejor su sorprendente mundo visual.
Comparación con la visión humana
Los gatos tienen una visión significativamente diferente a la humana. Mientras que los humanos poseemos tres tipos de células cono responsables de detectar el color (rojas, verdes y azules), los gatos carecen de uno de estos conos, lo que significa que tienen una visión más limitada en lo que respecta a los colores. Sin embargo, esta limitación se compensa con su capacidad para ver en la oscuridad y, como hemos mencionado, su habilidad para detectar la luz ultravioleta.
Además, el campo de visión de los gatos es mayor que el humano, alcanzando los 200 grados en comparación con los 180 de los humanos. Esto les permite estar más atentos a su entorno, lo que es crucial para sus habilidades de caza.
Es importante señalar que, aunque los humanos tienen una mejor resolución visual durante el día, los gatos poseen un número mayor de células en su retina llamadas bastones, lo que les permite ver en condiciones de baja luminosidad. Combinando este hecho con su visión ultravioleta, se puede decir que los gatos ven en un espectro completamente diferente al nuestro.
Sin duda, el estudio de la visión felina y su habilidad para ver lo que para nosotros es invisible nos hace reconsiderar lo que nuestros gatos podrían estar experimentando en su vida diaria, ampliando nuestro entendimiento sobre el mundo que los rodea.
Es fascinante pensar que estos pequeños depredadores tienen acceso a un mundo visual totalmente diferente al nuestro. Quizá la próxima vez que veas a tu gato mirando al vacío, no esté tan vacío como parece.