¿Cómo hidratar a los gatos?

Cuando empezamos a convivir con un gato una de las primeras cosas, sino la primera, que tenemos que hacer es proporcionarle un bebedero que esté siempre lleno de agua limpia y fresca. Para poder mantenerse hidratado y, por consiguiente, estar vivo, este preciado líquido es esencial. Sin embargo, hay que tener en cuenta que tanto si bebe poco como en exceso, podría tener problemas.

En este artículo te voy a contar cómo hidratar a los gatos y cuáles son esas consecuencias de no hacerlo correctamente.

El gato bebe poca agua

Esto hay que tenerlo siempre presente: este felino no es un gran bebedor de agua. Al ser originario de los desiertos cálidos, está acostumbrado a no encontrarla disponible. Entonces, ¿cómo se mantiene hidratado en la naturaleza? La respuesta en realidad es sencilla: gracias a los animales que caza.

Aunque si bien es cierto que no siempre tiene éxito, al ser un peludo más bien pequeño no tiene necesidad de comer (ni, por lo tanto, de beber) mucho. Lo que ha ocurrido en las últimas décadas es que hemos pasado de tener el gato en el campo donde podía cazar, a convivir con él en casa. Además, su alimentación también ha cambiado: si antes cazaba, ahora obtiene en la mayoría de los casos todas las proteínas que necesita gracias a un pienso, que puede ser húmedo o, más comúnmente, seco.

El pienso o las latas fueron un gran invento para nosotros: sólo se tienen que abrir y servir. Pero no es la comida más natural para un gato; ni siquiera el pienso de mejor calidad podría compararse con una presa cazada por el propio animal. Obviamente, nadie (o casi nadie) quiere tener ratones frescos en la nevera, pero eso no quita que no se le pueda dar otro tipo de carne, como la de pollo por ejemplo, que venden en las carnicerías.

Dándole una dieta casera y natural nos aseguraremos de que ingiere la cantidad de agua que necesita. Pero, ¿qué ocurre si está muy acostumbrado al pienso o si no queremos (o no podemos) darle comida casera? ¿Cómo mantenerlo hidratado?

Consejos para mantener hidratado al gato

El gato necesita beber entre los 50 y los 100ml de agua por cada kilo de pese. Durante los meses de más calor debería beber unas cantidades próximas a los 100ml, siendo muy recomendable que sea 70-80ml/kg. Pero claro, al ser un animal poco bebedor, a veces habrá que ingeniárselas para que ingieran toda el agua que necesitan. Y esto puede no resultar nada fácil.

Dale comida húmeda

Es el primer consejo que te doy. La comida húmeda (latas) tienen alrededor de un 70% de humedad, mientras que la seca (pienso seco) un 40%. La diferencia es muy grande, de modo que al menos durante el verano es muy aconsejable darle una o dos latas al día. De esta manera, se mantendrá correctamente hidratado.

Remoja su comida con agua o caldo

Teniendo en cuenta que las latas pueden salir caras, si quieres ahorrar un poco de dinero puedes remojar su pienso con agua o incluso con caldo de pollo casero (sin hueso). Así, seguirá comiendo lo mismo, pero tendrá un sabor un tanto diferente y la salud de sus riñones mejorará.

Cambia su bebedero por una fuente

Al gato no le suele gustar mucho beber agua estancada. Una manera para conseguir que beba es comprándole una fuente para gatos. Las hay de muchas formas: de cascada, de flor,… y su precio no es tan alto como podrías pensar (las más económicas salen por unos 20-25 euros). Con el agua en continuo movimiento, te aseguro que tu amigo beberá más de lo que solía beber.

¿Existe alguna alternativa a las fuentes? Bueno, si en estos momentos no puedes gastar ese dinero lo que puedes hacer (y de hecho, debes) es cambiarle el agua seguido, como mínimo una vez al día. Si tienes más gatos o si es verano, te aconsejo cambiarla dos veces o incluso tres.

Esa agua no la tires: puedes ir rellenando botellas y usarlas para regar las plantas, limpiar el suelo y/o los muebles, o para rellenar si tienes un acuario o pecera (quitándole previamente la suciedad que pueda haber caído cuando estaba en el bebedero).

¿Cómo saber si mi gato está deshidratado?

La deshidratación es un problema muy serio que requiere atención urgente. Especialmente durante la temporada veraniega hay que estar muy pendientes del gato para poder actuar a tiempo. Si ha bebido poca agua, el peludo mostrará los siguientes síntomas:

• Encías secas y »pegajosas».
• Baja elasticidad de la piel: si al levantarle un poco -no más de 3 o 4cm- el pescuezo (la piel que hay entre el cuello y los hombros) tarda más de dos segundos en volver a su estado normal, es porque le falta hidratarse.
• Ojos hundidos, secos. Pueden tener el tercer párpado visible.
• Patas frías al tacto.

Si muestra cualquiera de estos síntomas, hay que llevarlo al veterinario. Una vez allí, le suministrará fluidos por vía intravenosa, y es posible que le hagan un análisis de sangre y de orina para determinar su estado de salud.

Fallo renal en gatos, un problema causado por la incorrecta hidratación

Si un gato no se mantiene adecuadamente hidratado tiene más probabilidades de padecer problemas renales, siendo muy común la insuficiencia renal felina. Aunque puede aparecer por otras causas (como la vejez), si no bebe lo suficiente los riñones podrían empezar a fallar de un momento a otro.

Esta es una enfermedad que se caracteriza por el deterioro progresivo de dichos órganos. Los riñones de un gato sano eliminan las toxinas de la sangre y mantienen un nivel de agua adecuado, pero cuando empiezan a fallar, podrás ver que el peludo muestra estos síntomas:

• Bebe y orina más de lo normal.
• Pierde apetito y peso.
• Vomita, primero esporádicamente después con más frecuencia.
• Letargia.

Lamentablemente, cualquiera de estos síntomas aparece después de que el riñón comience a fallar, por lo que hay que estar muy pendientes de cualquier cambio que se produzca tanto en el propio gato como en su rutina.

Diagnóstico y tratamiento

Si sospechas que la padece, debes de llevarlo al veterinario para que le hagan un análisis de sangre y de orina. Si finalmente se confirma el diagnóstico, hay que cambiarle la dieta, dándole una comida con un bajo contenido de sal y de fósforo, y que además sea rica en vitaminas del grupo B, antioxidantes, potasio, y ácidos grasos omega 3. Este tratamiento en casa se deberá de combinar con el tratamiento veterinario, que puede consistir en la administración de antibióticos, estimulantes del apetito, y complejos vitamínicos y minerales.

Como vemos, es muy importante hidratar a nuestro amigo. De ello dependerá su salud a corto y a largo plazo.