Los gatos son animales fascinantes y llenos de personalidad, pero también pueden ser un desafío, especialmente cuando hablamos de sus uñas. Para ellos, las uñas son herramientas esenciales para marcar territorio, jugar y cazar. Sin embargo, esta habilidad natural puede convertirse en un problema cuando deciden arañar muebles, cortinas o incluso nuestras manos. Es por ello que enseñarles a no utilizar sus uñas de una manera inapropiada es fundamental.
¿Por qué los gatos arañan?
El comportamiento de arañar no es un capricho, sino una conducta innata repleta de propósito. Comprender las razones detrás de esta acción nos ayudará a abordarla de manera más eficaz:
- Marcaje territorial: Los gatos tienen glándulas en las almohadillas de sus patas que liberan feromonas. Al arañar, están dejando señales olfativas para marcar su territorio.
- Desgaste de las uñas: Arañar ayuda a los gatos a mantener sus uñas en perfecto estado, eliminando las capas externas desgastadas.
- Ejercicio físico y mental: Rascar superficies les permite estirarse y liberar energía, lo que resulta fundamental para su bienestar.
- Instinto de caza: Este comportamiento se relaciona con su naturaleza salvaje, ya que necesitan afilar sus garras y practicar habilidades de ataque.
Errores comunes al jugar con gatos
Uno de los errores más comunes es dejar que el gato juegue directamente con nuestras manos o pies. Este hábito puede parecer inofensivo cuando son cachorros, pero a medida que crecen, sus uñas y dientes se fortalecen, lo que puede resultar doloroso y hasta peligroso.
Cuando les permitimos morder o arañar nuestras manos, les estamos enviando el mensaje de que es un comportamiento aceptable. Para evitar esto, es crucial utilizar juguetes diseñados para gatos, como cuerdas, pelotas o plumas, que actúan como intermediarios entre el humano y el felino.
Cómo enseñar a mi gato a no arañar
A continuación, te ofrecemos consejos detallados para enseñarle a tu gato a no arañar de manera inapropiada:
1. Proporciónale un rascador adecuado
Los rascadores son esenciales para canalizar el instinto natural de tu gato. Puedes optar por rascadores horizontales, verticales o ambos, dependiendo de las preferencias de tu mascota. Asegúrate de que el rascador sea estable para evitar que se mueva y asuste al gato.
Coloca los rascadores en lugares estratégicos, como cerca de los muebles que suelen arañar o en sus áreas de descanso. Para incentivar su uso, espolvorea un poco de hierba gatera o nébeda en el rascador. Si no sabes cómo fabricarlo, consulta nuestra guía de rascadores para gatos caseros.
2. Redirige su atención
Si pillas a tu gato arañando un lugar indebido, di “¡No!” con firmeza, pero sin gritar, y redirígelo hacia el rascador. No lo castigues físicamente, ya que esto solo generará estrés y desconfianza. Aplaude o recompensa con una golosina cuando utilice el rascador.
3. Cubre los muebles
Para proteger tus muebles, utiliza cubiertas de plástico o materiales que tu gato no encuentre atractivos. Las fundas temporales pueden ayudar a que el felino pierda interés en esos lugares, mientras se acostumbra a utilizar su rascador.
4. Corta sus uñas
Recortar regularmente las uñas de tu gato reducirá el daño que puedan causar. Utiliza un cortaúñas especial para gatos y asegúrate de no cortar más allá de la zona rosada, que contiene vasos sanguíneos. Si no estás seguro de cómo hacerlo, consulta con un veterinario o lee nuestra guía sobre cómo bañar y cuidar correctamente a un gato.
5. Educación desde temprana edad
Es mucho más fácil enseñar a un gatito que a un gato adulto. Desde el primer día, establece límites claros y proporciona los recursos necesarios para satisfacer sus instintos de forma adecuada. Si estás considerando adoptar, descubre en cuál es la mejor edad para adoptar un gato.
¿Qué hacer si mi gato me araña?
En ocasiones, los gatos pueden arañar a las personas, especialmente durante el juego. Para abordar este comportamiento:
- Detén el juego de inmediato: Cuando tu gato te arañe, deja de interactuar con él para que entienda que su acción tiene consecuencias.
- Utiliza juguetes: Nunca permitas que tus manos sean el objetivo del juego. Usa juguetes que mantengan una distancia segura entre tú y el gato.
- No respondas con agresión: Si te araña, no lo castigues físicamente, ya que esto puede aumentar su estrés y empeorar el comportamiento.
¿Y si no para de arañar?
En casos graves donde el arañazo representa un problema constante, considera las siguientes estrategias adicionales:
- Consulta con un veterinario: Algunos comportamientos pueden estar relacionados con problemas de salud o estrés.
- Usa repelentes específicos: Hay productos diseñados para evitar que los gatos arañen muebles o paredes. Estos suelen ser seguros y efectivos.
- Enriquecimiento ambiental: Asegúrate de que tu gato tenga suficiente estimulación física y mental dentro del hogar, como rascadores, juguetes interactivos y lugares para trepar.
Con mucha paciencia y compromiso, lograrás que tu gato aprenda a redirigir su instinto de arañar hacia los lugares adecuados, mejorando así la convivencia en casa. Si necesitas más consejos, no dudes en explorar nuestra guía sobre cómo educar a un gato.
Nos alegra de que te guste, Coralia 🙂 .
Hola Diana.
Para que aprenda a no morderte has de detener el juego en cuanto veas que tiene intención de hacerlo, o dejarla en el suelo si estaba en una superficie alta (sofá, cama, mesa,…).
En este artículo tienes más información.
Un saludo.
Buenos días,
Y si le da por arañar la pared pero para quitar unas pegatinas/vinilos que hay enganchados,cómo se corrige ese comportamiento? o cómo la podemos reñir sin que se asuste? o sin que nos coja miedo?
Hola Esther.
Prueba a distraerla con una cuerda. Si es joven o una gata nerviosa, también es importante que se juegue con ella una hora cada día (repartida en varias sesiones cortas) hasta que se canse.
De todos modos, si quieres que deje »a la de ya» de hacer eso, es recomendable pulverizar/rociar, en este caso la pared, con algo que huela a cítricos (naranja, limón,…). Ese aroma no les gusta nada a los gatos.
Saludos!