A los gatos les gusta mucho jugar, y de hecho, es algo que necesitan hacer a diario para mantenerse en forma. Pero a menudo solemos pensar que basta con que les demos algunos juguetes y ya está, cuando la realidad es que si no jugamos con ellos… difícilmente ellos querrán usar sus juguetes.
Para crear un buen vínculo con nuestro querido amigo, es muy importante que le dediquemos tiempo. Por ello, si acabas de adoptar a uno y te estás preguntando cuánto tiempo hay que jugar con el gato, no dudes en seguir leyendo.
El juego es una forma muy interesante para fortalecer la relación humano-gato, ya que durante cada sesión podemos aprovechar para hacerle saber lo mucho que le queremos, ya sea con caricias, golosinas o diciéndole palabras bonitas mientras le miramos con los ojos entrecerrados y le acariciamos la espalda. A él seguro que le encantará, pues además le estaremos transmitiendo seguridad y tranquilidad, algo que nos permitirá estrechar lazos con nuestro gato.
Sabiendo esto, ¿cuánto tiempo tenemos que jugar con él? Pues siento decirte que no hay un tiempo mínimo, ni máximo. Cada gato es un mundo, y será él el que »te diga» cuándo quiere jugar y cuándo quiere parar. Pero, si quieres tener alguna idea, se recomiendan al menos tres sesiones de unos diez minutos cada una, aunque si el peludo es joven o muy activo, le apetecerá jugar más veces y/o por más tiempo.
¿Con qué jugar? Bueno, en las tiendas de animales encontraremos una gran variedad de juguetes, como cuerdas o pelotas, pero seguro que en casa tendremos algún cordón de zapato que ya no usemos, cajas de cartón lo suficientemente grandes para que pueda meterse el felino, o papel de aluminio con el que hacer bolas del tamaño de una pelota de golf.
Sólo con estos juguetes caseros, se lo pasará estupendamente bien. Y nosotros también .