Cuándo acariciar a un gato

Gato con humano

No hay nada más relajante que acariciar a un peludo, ¿verdad? Y menos cuando te mira con esos dulces ojitos tan bonitos. Pero si nunca antes habíamos convivido con un felino puede que no sepamos bien cuándo acariciar a un gato.

Este comportamiento mostrado en una mala situación puede causarnos daño. Para evitarlo, es muy importante conocer bien a nuestro querido amigo de cuatro patas para poder prever su reacción.

¿Cuando SÍ se puede acariciar a un gato?

Primero que todo vamos a ver cuando podemos dedicar unos minutos a acariciar a nuestro peludo sin tener que correr ningún riesgo. Pues bien, estas situaciones en realidad son varias, tal y como te explicamos a continuación:

  • Cuando está durmiendo a nuestro lado tranquilamente: este es un momento muy especial, pues el peludo se encuentra relajado. Eso sí, las caricias tienen que ser suaves y lentas.
  • Cuando está sentado junto a nosotros y nos observa curioso: en este momento lo podemos acariciar sin problema, aunque quizás esté más interesado en lo que tengamos cogido de la mano.
  • Cuando se acerca saludando: por ejemplo, si estamos trabajando con el ordenador y se acerca con un »miau».
  • Cuando se vea tranquilo: si nuestro peludo se ve tranquilo, podemos acariciarle sin problema.

¿Cuándo NO se puede acariciar a un gato?

Aunque son pocas las situaciones inadecuadas para acariciarle, tenemos que respetarlas ya que de lo contrario nos podría arañar. Son las siguientes:

  • Durante una pelea, o si está enfadado: si gruñe o bufa, no tenemos que tratarle como si fuera un bebé humano, sino que lo que haremos será dejarlo tranquilo y dejar que se pueda ir a un sitio donde relajarse. En el caso de que se esté peleando o de que vaya a hacerlo, trataremos de asustar a ambos animales haciendo un ruido fuerte, o yendo a paso rápido hacia ellos.
  • Mientras esté comiendo: hay muchos gatos a los que no les gusta que se les acaricie mientras comen, pudiendo reaccionar de manera agresiva.
  • Mientras esté en el arenero: por supuesto, si está usando su bandeja higiénica tampoco tenemos que acariciarle, a no ser que sea un gatito que esté aprendiendo a usarla, en cuyo caso sí podemos podemos darle caricias como premio.

Gato con humano

Esperamos que este artículo te sea de utilidad 🙂 .


El contenido del artículo se adhiere a nuestros principios de ética editorial. Para notificar un error pincha aquí.

Sé el primero en comentar

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.