Cuando planeas una salida y tienes un gato, surge la difícil pregunta: ¿qué puedes hacer con él? Si no tienes a nadie que pueda cuidarlo durante tu ausencia y no quieres dejarlo en una residencia para mascotas, la mejor solución es llevártelo contigo. Viajar con tu gato puede ser una experiencia maravillosa para ambos, ya que compartiréis momentos juntos y os aseguraréis de que no os echáis de menos.
Sin embargo, viajar con un gato requiere preparación y cuidados específicos para garantizar que tanto tú como tu peludo amigo disfrutéis del trayecto. A continuación, te damos una guía completa con todos los detalles que necesitas saber para realizar un viaje con tu gato sin contratiempos.
¿Cómo empezar a preparar a tu gato para el viaje?
Si es la primera vez que vas a llevar a tu gato de viaje, es importante que comiences a acostumbrarlo a los desplazamientos con tiempo. Esto le ayudará a sentirse más cómodo el día del viaje y reducirá su estrés.
- Realiza paseos cortos en coche: Antes del gran día, lleva a tu gato a hacer paseos cortos en coche para que se familiarice con el movimiento, los sonidos y el entorno. Es aconsejable hacerlo con frecuencia durante varias semanas previas.
- Familiarízalo con el transportín: Muchos gatos asocian el transportín con visitas al veterinario, lo que puede generar rechazo. Para evitar esto, deja el transportín abierto en casa con una manta o juguete que le guste. Esto ayudará a que lo relacione con un entorno seguro.
- Introduce feromonas sintéticas: Pulveriza el interior del transportín con feromonas relajantes como Feliway 30 minutos antes de cada trayecto. Estas sustancias imitan las feromonas naturales felinas y ayudan a calmar a tu gato.
Preparativos esenciales antes del viaje
Viajar con un gato no solo implica meterlo en un transportín y salir a la carretera. Hay elementos clave que debes tener en cuenta para asegurarte de que el trayecto sea cómodo y seguro:
- Selecciona el transportín adecuado: Escoge un modelo rígido con rejillas y cierres seguros. El tamaño debe ser lo suficientemente amplio para que tu gato pueda moverse y estirarse.
- Equipaje del gato: Lleva su caja de arena, comida y agua en cantidades suficientes. No olvides incluir una manta o cama que le resulte familiar y lo haga sentir seguro.
- Revisa su salud: Asegúrate de que tu mascota tenga todas las vacunas al día y lleva contigo su cartilla sanitaria. Si viajas fuera del país, consulta los requerimientos específicos en la web de viajes internacionales con gatos.
- Identificación: Equipar a tu gato con un collar que incluya una etiqueta identificativa y un microchip puede ser útil en caso de pérdida.
Consejos para el día del viaje
El día del viaje es crucial para que tu gato no experimente ansiedad o molestias innecesarias. Aquí tienes algunos consejos prácticos:
- No lo alimentes justo antes del trayecto: Para evitar mareos y vómitos, alimenta a tu gato tres horas antes de salir.
- Prepara el transportín: Además de la manta y el juguete, puedes colocar un empapador en caso de que se haga pipí durante el trayecto.
- Clima y ventilación: Asegúrate de que la temperatura del coche sea agradable, evitando tanto el calor excesivo como el frío. No coloques el transportín directamente bajo el aire acondicionado.
- Paradas regulares: Para viajes de más de 4 horas, haz paradas cada 2-3 horas para que pueda beber agua, usar su caja de arena y estirarse. Usa siempre arnés y correa para mayor seguridad.
¿Qué hacer si tu gato se pone nervioso?
Algunos gatos pueden ponerse muy nerviosos al viajar, por lo que es fundamental saber cómo gestionarlo:
- Feromonas y aceites esenciales: Rociar el transportín con feromonas sintéticas o usar aceites esenciales como el de naranja puede ser de gran ayuda para relajarlo.
- Remedios naturales: Si prefieres evitar medicamentos, puedes añadir unas gotas de Rescue Remedy de Bach en su comida o agua antes del viaje.
- Evita los sedantes convencionales: Los gatos sedados tienen restricciones de viaje, especialmente en aviones. Consulta siempre a tu veterinario antes de administrar cualquier medicamento.
Consejos para viajes largos y medios de transporte diferentes
Si vas a viajar en avión, tren, barco u otros medios de transporte, los cuidados deben adaptarse al trayecto:
- En avión: Verifica las políticas de la aerolínea respecto al transporte de mascotas. Muchas permiten gatos en cabina si cumplen ciertos requisitos de peso y tamaño.
- En tren: En trayectos largos, los gatos pueden viajar con sus dueños siempre que el transportín cumpla las normativas de la compañía ferroviaria.
- En barco: Algunos barcos permiten mascotas, pero puede que tu gato deba viajar en áreas específicas para animales. Consulta siempre con antelación.
Al llegar a tu destino
Cuando llegues a tu lugar de destino, permite que tu gato se adapte al nuevo entorno gradualmente. Prepara una habitación tranquila con sus objetos (comida, agua, caja de arena y cama) para que se sienta seguro. Déjalo explorar a su ritmo sin forzarlo.
Viajar con tu gato puede parecer un desafío al principio, pero con una preparación adecuada y siguiendo estos consejos, pronto descubrirás que es una experiencia enriquecedora para ambos. Planificar con antelación y asegurarte de que tu gato esté cómodo y seguro es clave para disfrutar del viaje y crear recuerdos inolvidables juntos.