Cómo sabe mi gato que lo quiero

Acaricia a tu gato para que se sienta querido

¿Cómo sabe mi gato que lo quiero? Es aes una muy buena pregunta, pues no siempre es fácil saberlo, sobretodo si es la primera vez que convivimos con uno ya que no entenderemos todavía mucho su lenguaje corporal. Pero todo tiene solución.

Si quieres descubrir si tu amigo de cuatro patas sabe que le quieres, a continuación te diré en qué te tienes que fijar para averiguarlo y, además, descubrirás qué hacer para que sea aún más feliz.

Dos gatos dormidos; es muy posible tenerlos

El aprecio y la confianza no son algo que se puedan conseguir de un día para otro, sino que se van sintiendo a medida que pasan los días y las semanas; en definitiva, que se va conviviendo con el gato e interactuando con él. Ya sabes, el roce hace al cariño, sobretodo cuando se trata de felinos y humanos 🙂 . Por eso, es muy importante que se le dedique tiempo, desde el primer día, a entender su lenguaje corporal y a hacer vida con él (jugar, descansar).

Los gatos cazan cosas desde que son jóvenes
Artículo relacionado:
¿Por qué hay que jugar con el gato?

¿Mi gato sabe que le quiero?

Sabiendo esto, ¿cómo podemos averiguar que el gato sabe que le queremos? Pues bien, con la observación. Solo observando el comportamiento del gato para con nosotros podremos descubrir si realmente lo sabe o no. El querer a alguien es algo que compartimos todos los animales mamíferos, sean humanos, felinos, cánidos, etc. Es un sentimiento que mantiene unidas a las familias, haciéndolas más fuertes sobretodo cuando hay cachorros o crías muy jóvenes, consiguiendo así manteniéndolos protegidos contra los posibles depredadores.

Conseguir ese cariño de un gato, independientemente de si es joven o adulto aunque será más fácil si es joven, lleva su tiempo. Pueden ser días, pero pueden ser semanas o meses. Todo va a depender del carácter y personalidad del felino, así como de su historia (si ha sido un gato que ha vivido siempre con personas y que de repente se ha visto solo, a los pocos días verás que te agradece y te pide que lo acaricies; en cambio, si ha sido un gato callejero o que no ha tenido mucho contacto con las personas, va a costar más ganarte su confianza).

No hay que olvidar que la confianza y el cariño van de la mano. No se puede esperar que un animal recién adoptado nos quiera solo por el hecho de haberlo sacado del refugio y de haberlo llevado a nuestro hogar, porque él necesita tiempo para adaptarse a su nueva situación. Lo que para nosotros es nuestra casa, para él es un lugar desconocido que, hasta que no vaya viendo que es seguro, no podrá ir sintiéndose cada vez menos asustado o con miedo.

Con respeto, paciencia y con algún que otro premio en forma de comida especial (latas, por ejemplo), se irá mostrando más confiado y tranquilo, y también más cariñoso.

¿En qué nos tenemos que fijar exactamente?

Gato con humano

En esto:

Nos saluda en cuanto llegamos/llega a casa

Y lo puede hacer de varias maneras: con un maullido corto como diciendo »hola» o »ya estoy aquí», frotando su cuerpo contra nuestras piernas, levantándose sobre sus dos patas traseras pidiendo que lo cojamos en brazos, y/o ronroneando solo por vernos.

Duerme muy cerca de nosotros, o con nosotros

No hay mejor prueba para saber si un gato sabe que le queremos que tumbarse en el sofá o en la cama, y esperar a que el felino se suba, algo que hará si nos tiene la suficiente confianza en cuestión de pocos minutos. A estos animales hogareños les encanta dormir con las personas, ya que para ellos es muy importante tener protegida su espalda mientras reciben mimos.

Gato durmiendo en la cama
Artículo relacionado:
¿Mi gato puede dormir conmigo?

Busca las caricias y puede ronronear mientras las disfruta

Si bien hay gatos que no ronronean, y hay otros que tienen un ronroneo muy suave, por lo general si estás viviendo con un peludo sociable y cariñoso y en ese momento lo estás acariciando, es más que probable que ronronee.

Abre y cierra los ojos lentamente cuando nos ve

Esto es parte del lenguaje corporal del gato. El parpadeo lento mirando a alguien es señal de amistad y confianza, algo que se hace cuando quieres que te coja confianza o que se sienta seguro, o para decirle que todo está bien, que le quieres.

Se frota contra las piernas y/o brazos

Es su forma de dejar su olor corporal, para reconocernos como parte de su familia (tienes más información sobre el tema aquí).

Le apetece jugar con nosotros

Para demostrarlo puede coger su juguete y llamarnos (con maullidos, claro está 🙂 ), empezar a jugar con él procurando que lo veamos, o poniéndose muy inquieto cuando nos ve sosteniéndolo.

Da masajes

El acto de »amasar» también es una forma de demostrarnos que nos quiere. Empieza a hacerlo desde que es muy bebé, para estimular la salida de la leche de su madre, y sigue haciéndolo de adulto cuando se siente muy, muy relajado, especialmente si la ropa que llevamos es de lana o similar, aunque en realidad lo hace siempre que quiere, independientemente de la tela con la que esté hecha nuestra ropa.

Nos lame

A menos que hayamos comido algo con buen sabor para él, si nos lame y tenemos las manos limpias es porque nos está acicalando. Esta muestra de afecto la tiene solo con aquellos con los que se siente seguro, de modo que sin duda este es un buen momento para darle una acaricia (o dos o tres 😉 ).

¿Cómo decir te quiero a tu gato?

Los gatos pueden ser muy cariñosos

Hay muchas maneras, pero todas se basan en tener paciencia, y en tratarlo con respeto y cariño. Hay gatos que no quieren ser acariciados y que tampoco toleran que los cojan, y deben ser respetados. Existen otras formas de demostrarles que les queremos, por ejemplo con comida, con hacer que el hogar sea seguro y tranquilo, con darles su espacio.

Con todo lo que te hemos ido diciendo en este artículo, no te será difícil conseguir una buena, bonita y duradera amistad con tu gato. Recuerda siempre que es fundamental ir a su ritmo, y no »obligarle» a ir al nuestro. Poco a poco irás viendo resultados.


3 comentarios, deja el tuyo

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.

  1.   Monica Sanchez dijo

    Hola Ángeles.
    No a todos los gatos les gusta que los cojan, simplemente porque no se sienten cómodos ni seguros.
    Uno de los míos tampoco le gusta estar entre mis brazos, y no pasa nada. Le doy cariño de otra manera (caricias, latitas, juegos).
    Un saludo 🙂

  2.   Thais dijo

    Mi gatita es un peluche de 18 años, fue ella la que me escogió a mí. Llovía a raudales y yo no tenía experiencia con felinos.
    No sé quién tenía más miedo; si yo de ella, o ella de mí ?

    Es lo mejor que me ha pasado en mi vida!
    ???

    1.    Monica Sanchez dijo

      Hola Thais.

      Sí, a veces los gatos llegan a nuestras vidas… casi sin querer.

      Enhorabuena.