Qué hacer si mi gato está en celo

Un gato en celo es un animal que hará todo lo posible por encontrar pareja, es decir, que maullará, puede marcar, si convive con otro felino se puede pelear con él, por las noches puede impedir que su familia descanse,… en definitiva, será un peludo que necesitará que nosotros modifiquemos nuestra rutina para que la convivencia sea agradable y no haya sobresaltos ni problemas.

Si tienes un felino que está pasando por esto, es probable que te preguntes qué hacer si mi gato está en celo, ¿verdad? Si es así, sigue nuestros consejos y ya verás como poco a poco todo vuelve a la normalidad.

¿Cómo se comporta el gato en celo?

Un gato en celo maúlla de manera incesante, especialmente por la noche. Se acerca a la ventana o a la puerta, y trata de llamar a una hembra. Además, marca con orina varios rincones de la casa, dejando un olor muy desagradable.

Si se le presenta la oportunidad, saldrá al exterior, donde es probable que se encuentre con otro macho, y si hay una gata cerca… se peleará con él. Aunque no nos guste, este es un comportamiento natural en él.

¿Y la gata?

La gata se muestra muy, muy cariñosa. Se restriega allá por donde pasa, levanta la cola cada vez que la acaricias la espalda, y también maúlla por la noche. En estos días, su instinto reproductor es más intenso, por lo que va a hacer lo que sea por conseguir pareja.

Y, desde luego, si sale al exterior, lo más probable es que regrese a casa embarazada.

¿Qué hacer?

Tanto si tienes un gato como una gata en celo, es muy importante tener mucha paciencia. El celo dura entre 3 y 10 días, así que no queda otra que tratar de sobrellevarlo lo mejor posible, de la manera más tranquila posible.

Pero aparte de paciencia es conveniente que se le mantenga activo durante el día. De esta manera, llegará la noche y estará muy cansado, por lo que en vez de maullar, se irá a descansar. Así pues, cuando esté despierto, hay que jugar con él.

Y para evitar que marque por toda la casa, nada mejor que utilizar Feliway o cualquier otro producto similar, preferentemente en difusor ya que así actuará por toda la habitación, evitando que el gato orine donde no tiene que hacerlo.

De todas maneras, si no se quiere hacer criar al gato, lo ideal es castrarlo. Así se le evita el celo, consiguiendo que el animal (y el humano) pueda descansar sin tener preocuparse por nada.

Las etapas del celo en las gatas

En promedio, una gata está en celo durante 3 a 10 días, como te hemos comentado más arriba. Sin embargo, puede durar tan poco como un día o hasta tres semanas. Las gatas no castradas en edad reproductiva se llaman reinas. Los gatos son poliestros, lo que significa que las reinas suelen entrar en celo varias veces al año hasta que se aparean.

• Proestro: Durante el proestro, la reina puede atraer machos innecesarios, pero aún no es receptiva al apareamiento. El proestro generalmente dura uno o dos días. Las reinas en proestro generalmente no muestran signos externos.
• Estro (celo): a continuación, la reina entra en celo. Durante aproximadamente una semana (más o menos), atraerá a los machos y es receptiva al apareamiento. Durante esta etapa, la reina puede vocalizar en voz alta, rodar, frotarse con cosas y elevar su trasero. Ella también puede tener una disminución del apetito. Si la reina se aparea durante el estro, inducirá la ovulación. El acto de apareamiento estimula la producción de hormonas que desencadena la ovulación. Las reinas generalmente necesitan aparearse entre cuatro y seis veces durante el celo para quedar embarazadas. La reina puede aparearse con varios machos mientras está en celo y dar a luz a una camada de gatitos que tienen padres diferentes.
• Interestrus: si la reina no se aparean o quedan embarazadas durante el celo, pasará a interestrus. Este es el período entre series. Su nivel de estrógeno cae y no muestra signos específicos. Después de aproximadamente dos días a tres semanas, ella nuevamente entrará en celo. El ciclo de proestro, celo e interestrus continuará durante la temporada de apareamiento o hasta que la reina quede embarazada.
• Anestro:  Este es el período de inactividad reproductiva de la reina. Sus hormonas reproductivas no son activas y hay ausencia de actividad del ciclo estral. Ella no está en temporada de celo. En gatos salvajes y al aire libre, los ciclos de celo ocurren estacionalmente desde la primavera hasta el otoño. Esto se debe a que la producción de hormonas de la reina es estimulada por la luz de días más largos. Cuando los días son más cortos (particularmente de octubre a enero) la reina no es estimulada para entrar en celo. Los gatos de interior están expuestos a largos períodos de luz artificial y, por lo tanto, pueden continuar pasando por ciclos de celo durante todo el año.

¿Cuándo entrará mi gata en celo?

Las gatas no castradas pueden tener su primer ciclo de celo a partir de los cuatro meses de edad, aunque la edad promedio es de cinco a nueve meses para la mayoría de las gatas. Si tienes un gatito y deseas evitar que entre en celo, es mejor que lo esterilicen tan pronto como tu veterinario piense que es seguro. Esto generalmente es a más tardar de cuatro a seis meses de edad, pero puede ser tan pronto como seis a doce semanas de edad.

Razones para prevenir el celo en gatos domésticos

Tan pronto como tu gatita tenga su primer celo, podrá quedar embarazada. Las hormonas en su sistema la hacen ansiosa por encontrar pareja. Probablemente llorará de una manera que suena a agonía. Puede rodar por el suelo y frotar con todo lo que esté a la vista. Lo que es más importante, si ella está solo en interiores, puede intentar escapar de su hogar en busca de un compañero. 

No solo es peligroso para ella estar afuera donde puede perderse o lesionarse, sino que también es inseguro que quede embarazada a una edad tan temprana. Su cuerpo no ha terminado de crecer, por lo que el embarazo puede ser perjudicial para ella y los gatitos.

Si tu gata no sale de la casa para aparearse durante su primer celo, continuará con un ciclo de celo cada pocas semanas hasta que quede embarazada o se esterilice. Esto puede hacer que parezca que ella está constantemente en celo. Con el tiempo, esto puede ser estresante y poco saludable para tu gata. Puede perder peso, comenzar a lamerse en exceso e incluso desarrollar problemas de comportamiento.

Si permites que tu gata quede embarazada, está aumentando el problema de sobrepoblación de mascotas del mundo. Hay innumerables gatos y gatitos esperando en los refugios para encontrar hogares. Incluso si encuentras hogares para los gatitos de tu gato, debes tener en cuenta que esos gatitos están reemplazando a los gatos de refugio que podrían haber encontrado hogares. A menos que tengas un gato de pedigrí y estés preparado para asociarse con un criador de gatos para una cría responsable, debes asegurarte de que tu gatita sea esterilizada lo antes posible.

Qué puedo hacer con mi gata en celo

Además de esterilizarla lo antes posible es buena idea tener en cuenta algunos consejos, a tener en cuenta lo siguiente:

• El celo de tu gato/a puede ser difícil para ti y tu gato/a. Los aullidos por el celo pueden ser desesperantes y si quiere escapar puede ser estresante también. Por eso es importante que antes de nada pongas una solución con la esterilización.
• Más caricias y cepillados durante el celo. Para algunos gatos, un poco de atención extra puede ayudar a aliviar el estrés del estro. Presta atención adicional a tu amigo felino en el hogar cuando estés en celo, y es posible que le calmes y mantengas manejables sus niveles de estrés.
• Tranquilidad. Necesitará tranquilidad. Solo asegúrate de que tenga un espacio cómodo y privado, como un árbol para gatos o el estante superior de un armario donde pueda escapar de la conmoción cuando necesite paz y tranquilidad.
• Los gatos en celo pueden necesitar algo de tiempo extra para jugar. Para los gatos, la necesidad de aparearse es instintiva. Así es la necesidad de cazar. Intenta mantener a tu gato ocupado con juguetes emocionantes que despierten sus instintos de caza. Puede distraerle de sus otros impulsos.
• Asegura el perímetro. Un gato en celo es un artista de escape por excelencia. Tienes que asegurarte de mantener tu hogar seguro y sella cualquier posible ruta de escape, como ventanas, puertas para gatos y puertas con mosquiteros que se abran fácilmente.